Washington, 2 may (EFE).- La crisis económica en la que se encuentran los medios de comunicación y las políticas que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está implementando en su regreso a la Casa Blanca han deteriorado la libertad de prensa en el país, según el último informe de Reporteros Sin Fronteras (RSF) publicado este viernes.
EE.UU. retrocedió dos posiciones, hasta el puesto número 57 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de 2025, que RSF publica anualmente con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa.
“El segundo mandato de Trump ha provocado un preocupante deterioro de la libertad de prensa. Su Administración ha politizado las instituciones, reducido el apoyo a los medios independientes y marginado a los periodistas”, recoge el informe.
Entre otras cosas, la organización señala como “un grave impacto en el panorama mediático internacional” el desmantelamiento de la agencia estadounidense para los medios de comunicación (USAGM, en inglés), que ha provocado el cierre de algunos medios históricos como Voice of America (VOA) y el despido de miles de empleados del sector.
“Más de 400 millones de personas en todo el mundo se han visto privadas, de la noche a la mañana, de acceso a una información fiable”, asegura RSF al respecto.
La organización lamenta que el Gobierno estadounidense haya “instrumentalizado motivos económicos falaces para someter a la prensa”.
Pero el recorte de la financiación de USAGM no es el único que ha afectado al ejercicio periodístico. El informe afirma que la congelación de los fondos de la histórica Usaid, la mayor agencia de cooperación gubernamental del mundo, obligó a cerrar algunos medios más allá de las fronteras estadounidenses, especialmente en Ucrania.
Además, RSF cree que la recesión económica de los medios está convirtiendo en desiertos informativos a extensas regiones del país.
De acuerdo con el indicador económico de la clasificación, EE.UU. ha perdido 14 puntos en los últimos dos años.
Para la organización con sede en París, una de las principales víctimas es el periodismo local.
“Más del 60 % de los periodistas y expertos en medios encuestados por RSF en Arizona, Florida, Nevada y Pensilvania coinciden en que es ‘difícil ganarse la vida como periodista’ y el 75 % afirma que ‘la viabilidad económica de un medio de comunicación de tamaño mediano es difícil'”, explicó.
Pese a que en comparación con el informe del año pasado EE.UU. solo ha retrocedido dos puestos, esta clasificación confirma una tendencia en la que el país está sumido desde hace cuatro años, cuando se encontraba quince puntos más alto en la clasificación.
Así se desprende de los últimos informes publicados: en términos de libertad de prensa a nivel global, Estados Unidos ocupaba el puesto 42 en el estudio de 2022, el 45 en el de 2023, el 55 en el de 2024 y el 57 en este último.
En líneas generales, RSF señala que la estabilidad financiera es un problema en 160 de los 180 países que ha analizado. Estas dificultades están provocando que en casi un tercio de los países del mundo -EE.UU., entre ellos- el cierre de medios de comunicación sea algo “constante”.
En términos generales, los tres países con mejor valoración en materia de libertad de prensa son según RSF Noruega, Estonia y Países Bajos, mientras que los tres últimos son China, Corea del Norte y Eritrea, que ocupa el puesto 180.