Madrid, 24 ago (EFE).- Turkish Airlines ha removido el mapa aéreo europeo con su irrupción en Air Europa y el futuro establecimiento de un eje Madrid-Estambul, que en caso de materializarse situará al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas como una plataforma internacional que conectará el Atlántico con los países asiáticos.
«Si la compra se concreta, Turkish Airlines puede consolidar aún más su estatus como una de las aerolíneas más importantes del mundo, lo que aumentará la presión competitiva sobre sus rivales europeos» en un momento clave, como el actual, en el que el mercado aéreo global se está «reconfigurando», afirma a EFE Antonio Castelo, analista de iBroker.
La operación, si se cierra, conllevará además que Air Europa continúe operando desde el aeropuerto de Madrid de forma independiente de la británica IAG, la alemana Lufthansa y la francesa AIR France-LKM (todas ellas de una forma u otra han mantenido conversaciones para entrar en el accionariado de Air Europa).
Más de seis años a vueltas con IAG, Lufthansa y KLM-France
Después de más de seis años a vueltas con la compra de Air Europa a Globalia, el acuerdo ha sido cerrado con Turkish Airlines por 300 millones de euros, una cuantía que le dará paso a entrar en la aerolínea con el 26 o 27 % de las acciones. Por su parte Globalia -que ahora tiene el 80 % de la compañía- seguirá manteniendo una posición de control.
IAG, dueña de Iberia, tiene el 20 % de Air Europa, una participación que «es financiera» -no está en el consejo-, por lo que «tarde o temprano se espera que proceda a su desinversión», afirma Castelo, que cita un informe elaborado por expertos de GVC.
GVC vaticina que, con la entrada de Turkish, Air Europa pueda tener un mejor acceso a los aviones de última generación y adoptar «quizás» un «perfil más agresivo de captación de cuota de mercado, lo que perjudicará a IAG» -en lo que a competencia en el mercado se refiere-, explica Castelo. Situación similar la tendrán Lufthansa y Air France-KLM.
Air Europa quiere que Turkish sí participe en la gestión, a diferencia de IAG que no lo hace, y le ha ofrecido incluso un consejero, según desveló el presidente de Air Europa, Juan José Hidalgo, en una entrevista con EFE este sábado.
El aeropuerto de Estambul, el activo más valioso de Turkish
El activo más valioso de Turkish es el aeropuerto de Estambul, que funciona como un gigantesco ‘hub’ (centro) que conecta de una «forma eficiente» Europa, Asia, África y América y que le permite ofrecer tiempos de conexión competitivos, según Castelo.
Por su parte, Air Europa, es la segunda compañía aérea española y opera desde el aeropuerto de Barajas, que es la mayor puerta de entrada a Latinoamérica desde Europa. La presencia de Air Europa en Latinoamérica es uno de los motivos por los que ha querido entrar Turkish en la compañía.
En Europa, operan Lufthansa, con una flota de 700 aviones; IAG, con 580; y Air France-KLM, con 540 aviones, según datos aportados por Castelo. Air Europa lo hace con 50 aviones.
En el caso de que prospere la operación, para lo que hay un plazo estipulado de entre 6 y 12 meses, Air Europa operará con el respaldo de Turkish, la aerolínea «con la red de destinos más extensa del mundo» y con una flota de 491 aviones.
El grupo turco opera en 353 destinos del mundo y movió más de 50 millones de pasajeros en los primeros siete meses del año.
No sin riesgos
Aunque la operación es interesante para el sector, no está exenta de riesgos.
Según el análisis efectuado por Castelo, Turkish enfrenta riesgos como la volatilidad de la divisa turca, la competencia de las aerolíneas del golfo, la sensibilidad a las tensiones geopolíticas y la dependencia del crecimiento económico de su país.
GVC valora a Air Europa en 1.111 millones y la participación de IAG entre 230 y 222 millones.
Relaciones con Airbus y Boeing y conexiones con Asia
Las relaciones de Turkish con Airbus y Boeing, ante el volumen de pedidos de aeronaves que efectúa; además de los destinos programados que tiene a Asia y, entre ellos, a China, hace que la oferta de Turkish haya sido considerada atractiva por Globalia, que quiere apoyo en su estrategia de crecimiento.
Los 300 millones aportados por Turkis suponen un oxígeno financiero a Air Europa, que quiere cancelar cuanto antes el préstamo de 470 millones de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) por el que se han pagado más de 100 millones de intereses, según Hidalgo.
Belén Molleda