Un centenar de vecinos de Igüeña (León), evacuados tras agravarse el fuego por el viento

Trabajos de extinción y prevención llevados a cabo la ultima noche en el entorno de Moncabril por el incendio forestal de Porto (Zamora). EFEGuardia Civil de Zamora // SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)

Valladolid, 21 ago (EFE).- El viento que sopló desde este miércoles por la tarde ha agravado la situación del fuego que se declaró el pasado martes en el municipio leonés de Igüeña, donde sus vecinos -en torno a un centenar- han sido evacuados al pabellón Bembibre Arena, en el municipio berciano de Bembibre.

Trabajos de extinción y prevención llevados a cabo la ultima noche en el entorno de Moncabril por el incendio forestal de Porto (Zamora). EFEGuardia Civil de Zamora // SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)

Debido a esta reproducción del fuego, la Junta de Castilla y León elevó ayer por la noche el nivel de gravedad de este fuego de nivel IGR 1 a 2, por la cercanía con la localidad que precisamente ha tenido que ser desalojada.

Además, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha informado a través de su cuenta de X de que han puesto en conocimiento de la Delegación del Gobierno este nuevo foco del incendio, al entender los técnicos que se trata de un fuego intencionado para «romper la estrategia» del operativo que trabaja desde el martes en el lugar.

«Hay que llevar ante la justicia, de forma inmediata, a quienes están causando tanto dolor», ha expresado el presidente de la Junta.

Después de que la cercanía de las llamas obligara a última hora del miércoles a evacuar la localidad de Colinas del Campo de Martín Moro Toledano, declarada Bien de Interés Cultural en el municipio leonés de Igüeña, también la propia cabecera municipal tuvo que ser desaloja horas después por la mala evolución del fuego, según ha informado Subdelegación de Gobierno.

Así, un centenar de vecinos de Igüeña han pasado la noche en Bembibre, mientras numerosos medios han trabajaban durante la noche con maquinaria pesada para asegurar los perímetros.

De momento, el fuego ha respetado estos enclaves, a la espera de que la incorporación de medios aéreos contribuya desde primera hora de este jueves a frenar su avance en una zona de gran riqueza paisajística.

En paralelo, lo positivo estaba en las pedanías de Ponferrada, pues las autoridades han confirmado la vuelta de los vecinos a Espinoso de Compludo, Carracedo de Compludo, Palacios de Compludo y Compludo, aunque bajo medidas de confinamiento urbano.

Así, solo Peñalba de Santiago, en pleno Valle del Silencio, mantiene la evacuación.

Además, durante la noche se ha conseguido acabar con la llama del incendio de Gestoso-Oencia, donde se han eliminado los puntos calientes, aunque resta la tarea de perimetración y de control de las posibles reactivaciones.

Situación en la Comunidad

Actualmente se lucha en Castilla y León contra 8 incendios de índice de gravedad potencial 2: son los fuegos de Fasgar, Anlleres del Sil, Barniedo de la Reina, Llamas de Cabrera, Igüeña y Gestoso, en León; Porto, en Zamora; y Cardaño de Arriba, en Palencia.

Hay otros 6 de nivel 1: en Yeres, Paradiña, Castrocalbón y Canalejas, en León; Molezuelas, en Zamora; y Candelario, en Salamanca, que es el fuego de Jarilla (Cáceres) que pasó el lunes a Castilla y León.

Además, otros 11 focos siguen activos y otros 17 fuegos figuran como controlados, pero que exigen vigilancia por posibles reactivaciones, tras doce días en los que se han declarado en Castilla y León más de 200 incendios.

Medio Ambiente ha indicado que la noche ha sido favorable en general, si bien los fuegos evolucionan de manera diferente, preocupando en estos momentos el de Porto, que afecta al Parque Natural del Lago de Sanabria, y los leoneses de Fasgar, Anlleres del Sil y Barniedo de la Reina, por su entrada en Palencia.

El aumento de la humedad y la bajada de temperaturas favorecen buenos resultados de las maniobras nocturnas realizadas, han insistido, pero en contra de los trabajos de extinción está el viento constante.