Sídney (Australia), 22 sep (EFE).- Los habitantes de Nueva Zelanda y de algunos países insulares del Pacífico pudieron apreciar este lunes un eclipse parcial solar, que tardó más de cuatro horas en completarse.

En la ciudad neozelandesa de Dunedin, en la Isla Sur, el eclipse alcanzó su cenit alrededor de las 7:20 hora local (19.20 GMT del domingo) cuando la Luna cubrió hasta el 70 % del Sol, recoge la web especializada Space.com

Otras zonas del país oceánico, como Auckland, tuvieron menor fortuna y las nubes impidieron disfrutar plenamente de este fenómeno astronómico.
Durante el eclipse, la Luna se interpuso parcialmente entre la Tierra y el Sol, provocando que el disco solar apareciera oscurecido en diferentes grados, según la ubicación.
El fenómeno comenzó en el Pacífico a las 17:29 GMT del domingo (05:29 del lunes 22 de septiembre en Nueva Zelanda) y concluyó a las 21:53 GMT (09:53 del mismo día en Nueva Zelanda).
El eclipse parcial también se divisó desde otras regiones del Pacífico como Samoa, Fiyi y Tonga, recoge el citado portal.
«El último fragmento del eclipse será visible desde la Península Antártica (…) donde habrá muchos más pingüinos que personas para presenciar el espectáculo», apuntó el periodista Anthony Wood durante la retransmisión en directo de Space.com.
Aunque no fue un eclipse total en ninguna de estas regiones, se trata de un fenómeno de gran interés para astrónomos y aficionados, ya que permite observar la interacción entre el Sol y la Luna y estudiar la corona solar con instrumentos especializados.
Los expertos advierten, sin embargo, que la observación directa sin protección adecuada puede causar daños oculares graves, incluso durante fases parciales, por lo que recomiendan el uso de filtros certificados o métodos indirectos de proyección de la imagen del Sol.
Este eclipse parcial es parte de un ciclo de eventos que preceden al esperado eclipse total de 2026, que se verá en varios países de Europa, Oriente Medio y Asia. Los astrónomos destacan que cada fenómeno, aunque parcial, ofrece oportunidades únicas para la investigación y para acercar la astronomía al público.