Una pionera pieza de arte urbano baja hasta diez grados la temperatura del suelo de Viena

Un proyecto en el que convergen arte urbano, ciencia y responsabilidad climática, ha conseguido, mediante el uso de pinturas especiales biodegradables, bajar hasta diez grados la temperatura del suelo de un patio vienés. EFE/ Núria Morchón

Viena, 22 ago (EFE).- Un proyecto en el que convergen arte urbano, ciencia y responsabilidad climática, ha conseguido, mediante el uso de pinturas especiales biodegradables, bajar hasta diez grados la temperatura del suelo de un patio vienés.

Concebida como una posibilidad de adaptación al aumento de las temperaturas, la creación artístico-científica del grupo ‘Holla Hoop’ integrado por los artistas austríacos Kalo Paier, Jonas Griessler, y Philo Jobstl- recibe el nombre de ‘CO2ntext’ y se encuentra en el suelo del patio Hanuschhof, donde se ubica el Museo Heidi Horten y la sede de los Teatros Federales en la capital.

“El verano pasado leí un artículo sobre un colectivo de tres jóvenes artistas que transformaron una cancha de baloncesto con colores que absorben el calor y así cambiaron el clima del lugar”, explicó en una entrevista a EFE la directora del Museo Heidi Horten, Agnes Husslein.

La originalidad de esa obra empujó a la directora a contactar a sus autores, que ahora han hecho realidad el diseño del patio utilizando esta especial pintura, reflectante de los rayos UV (ultravioleta).

“Lo descubrimos en un proyecto donde pintamos dos canchas. Un año antes habíamos pedido muestras y las probamos. Pensábamos que era una estrategia de marketing, que no funcionaba. Pero sí funcionó muy bien, resistió al exterior”, precisó el grupo en una entrevista en línea con EFE al respecto de los materiales.

El pigmento utilizado por los artistas refleja la luz solar de forma mucho más eficaz que el asfalto tradicional, que absorbe hasta el 90 % y retiene el calor, por lo que el resultado ha sido un enfriamiento en el microclima del patio de cinco a diez grados, dependiendo de la claridad de los colores.

 

Un más allá de lo estético

Un proyecto en el que convergen arte urbano, ciencia y responsabilidad climática, ha conseguido, mediante el uso de pinturas especiales biodegradables, bajar hasta diez grados la temperatura del suelo de un patio vienés. EFE/ Núria Morchón

El colectivo también se volcó en que el proyecto fuese más allá de lo estético y lo visualmente atractivo, albergando en él un simbolismo relacionado con la concienciación climática.

La obra está compuesta por cuarenta formas de colores, unas al lado de las otras, representando cada una de ellas un año desde 1960 hasta el 2000, y dentro de las mismas hay pequeños puntos que simbolizan las miles de millones de toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera que se han ido acumulando año a año.

“Hemos recibido diversas consultas sobre el proyecto, tanto a escala nacional como internacional. Creemos que esta técnica podría funcionar también en otros lugares,”, destacó Hussein, quien afirmó estar sirviendo de inspiración para muchos otros.

El proyecto cuenta con el apoyo de Hans-Peter Hutter, catedrático de la Facultad de Higiene Ambiental de la Universidad de Viena, quien lleva años investigando los efectos del cambio climático en la salud pública y aboga por reformas estructurales y una planificación urbana sostenible para mitigar el impacto del calentamiento del planeta.

“Proyectos como ‘CO2ntext’, que combinan estrategias de protección y adaptación climática con creatividad e imaginación, son increíblemente importantes. Sirven como ejemplos inspiradores de cómo podemos abordar cuestiones difíciles con ligereza, sin negarlas ni suprimirlas”, valoró Hutter en un comunicado de prensa.

‘Holla Hoop’ es un grupo de jóvenes artistas emergentes que, desde 2021, desarrolla proyectos a gran escala principalmente en espacios deportivos, con el objetivo de transformar esos entornos en lugares más acogedores y sostenibles, integrando arte, funcionalidad y conciencia climática en sus propuestas.