Luis G Morera

La Laguna (La Palma), 6 jun. (EFE).- Por tercera vez desde el 19 de septiembre de 2021, los reyes de España han vuelto a La Palma para conocer la evolución de la reconstrucción de La Palma tras el volcán y con el deseo de los afectados de que su presencia no sea un gesto vacío, sino un acto de reconocimiento sincero a una reconstrucción que avanza con más dignidad que velocidad.

A tres años y nueve meses de la erupción del volcán Tajogaite, don Felipe y doña Letizia han visitado dos puntos del Valle de Aridane acompañados por la ministra de Defensa, Margarita Robles; el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo; el presidente del Cabildo de La Palma, Sergio Rodríguez, y otras autoridades locales.
La visita comenzó en el mirador del Lomo del Piojo, en la zona de Tacande. Desde allí, el horizonte que antes era verde y salpicado de casas o cultivos, sigue cubierto por una cicatriz negra. Bajo la colada, el recuerdo de hogares, invernaderos, escuelas y senderos borrados.
“Es un lugar bastante gráfico”, como lo describió el Comisionado para la Reconstrucción, Héctor Izquierdo, ya que la magnitud de la destrucción puede medirse con la vista y con la imaginación a partir de las edificaciones que se extienden en los bordes de las coladas.
El segundo punto de la visita fue La Laguna, en Los Llanos de Aridane, la misma plaza donde, en septiembre de 2021, los reyes saludaron a los primeros evacuados meses antes de que la lava alcanzara el barrio, sepultando viviendas, infraestructuras y dañando seriamente su colegio que aún no ha sido reconstruido.
Esta vez los reyes se han encontrado con un grupo diverso de afectados: agricultores que vieron desaparecer sus cultivos de plátano y aguacate, pescadores que ya no faenan donde la lava cambió el mar, familias que tuvieron que empezar de cero, y docentes que han vuelto a las aulas con la memoria aún fresca del desastre.
También saludaron al centenar de personas reunidas en la plaza de La Laguna que aprovecharon para tomarse fotos y comentar su situación con los monarcas, que se mostraron cercanos y empáticos
“Esta visita les brinda esperanza, consuelo y visibilidad a la reconstrucción”, ha señalado el comisionado para la Reconstrucción de La Palma, Héctor Izquierdo, quien no ha escondido su preocupación por el ritmo desigual del proceso.
“Si bien las cifras macro reflejan cierta recuperación, funcionaron los ERTE y zonas como Puerto Naos y La Bombilla se reactivan, en la agricultura la situación es otra” ha reconocido, ya que “cuesta mucho sorribar la colada, es decir, preparar la finca para que vuelva a ser cultivable, y no todos pueden permitírselo aún”.
Esa tensión entre lo avanzado y lo pendiente también estuvo presente en las palabras de Marcelino Rodríguez, presidente vecinal de La Laguna que ha afirmado que “nuestro barrio sigue dividido por la lava, así que no queremos que esto sea una película bonita porque vienen los reyes (…) sino que vean la realidad”.
Y la realidad, cuatro años después, es una mezcla de resignación y tenacidad. El barrio de Todoque ya no existe. Las Manchas siguen aisladas. La Laguna continúa en reconstrucción. Y sin embargo, también hay aulas que vuelven a abrir, negocios reconstruidos, y personas que plantan nuevas raíces sobre la ceniza.