Málaga, 14 mar (EFE).- El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha recorrido este viernes durante casi una hora las dependencias de La Casa Invisible, centro social y cultural de Málaga que tiene como sede un edificio municipal okupado desde 2007, y la ha calificado como “centro cultural de referencia” en España.
Urtasun ha destacado que La Casa Invisible “programa cultura de una forma maravillosa que permite la residencia de artistas, participa de la convocatoria de ayudas para residencia y ha participado en los últimos años en programas importantes del Ministerio de Cultura como el de ‘Cultura y ciudadanía'”.
“Es un placer visitarlo y ver el trabajo que se realiza con sus responsables”, ha asegurado a los periodistas tras estar en las obras de una futura biblioteca.
Preguntado sobre si su visita es un apoyo a La Invisible en su contencioso con el Ayuntamiento al existir un decreto municipal de cierre, ha manifestado que “simplemente” iba “a conocer sus actividades”.
Sobre si habría que buscar solución para preservar ese espacio, ha explicado que sabe que hay un diálogo en marcha entre el centro cultural y el Consistorio, que deja en manos de ambas partes “para encontrar una solución” y que, por prudencia, no entra en el asunto.
Ha añadido que iba a visitar ese lugar, que considera que “hace una actividad que es muy valiosa para la ciudad”.
Un millar de personas, más según los convocantes, participaron hace un año en una manifestación en defensa de La Invisible, que pidieron que el Ayuntamiento retomase el diálogo para su cesión, reclamaron la continuidad del espacio y se opusieron a la situación calificada de “hostigamiento constante”.
Por su parte, la portavoz de La Invisible y abogada, Amanda Romero, ha explicado este viernes a EFE, tras la reunión entre Urtasun y representantes del centro, que ha supuesto “un reconocimiento del proyecto, del que ya tenía referencia”, y ha recordado que el colectivo lleva años trabajando con el ministerio, independientemente del signo político de su titular.
“Reconocimiento explícito”
“Es un reconocimiento explícito” a la labor, ha resaltado Romero, para añadir que “se ha puesto sobre la mesa la necesidad de preservar y garantizar la continuidad del proyecto” y que espera que la visita “dé sus frutos”.
Ha indicado que se está pendiente de los siguientes pasos para esa continuidad y que han quedado en mantener contacto con su equipo para conseguir el objetivo.
Romero ha precisado que lo que más llamó la atención del ministro es “el modelo de gestión del espacio, en el que caben vecinos, creadores locales y la proyección a nivel nacional e internacional por las alianzas que se hayan podido generar y los proyectos que se han podido plantear con distintas instituciones”.
Se ha mostrado atraído por la “diversidad en edades, orígenes y la dimensión desde lo local a lo internacional” y cree que con la visita “se ha evidenciado la necesidad de dar continuidad al proyecto, que todo el rato ponía como de referencia a nivel estatal”.
Orden de cierre tras 18 años
Precisamente este mes cumple 18 años La Invisible y pesa sobre ella una orden municipal de cierre desde 2024.
“Desde hace un año, todo el aparato legal del Ayuntamiento que se puede poner en marcha para intentar asfixiar al proyecto sigue vigente. Pese a la ofensiva de asfixiar e intentarlo por todas las vías, el espacio genera proyectos y actividad, aunque sean más internos porque nos impiden actividades de carácter público”, ha señalado.
Ha explicado que no pueden pedir licencia de actividad al no disponer de la cesión del edificio, lo que no ejecuta el Consistorio pese a sus compromisos al respecto.
Cree “paradójica” y “kafkiana” la situación cuando el Ayuntamiento lo reconoció como proyecto de interés público municipal en mayo de 2016, dada la actividad desarrollada hasta entonces pese a carecer de licencia, pero se produjo un “viraje inesperado”.
Por su parte, desde el grupo político ‘Con Málaga’ (Izquierda Unida y Podemos) confían en que “tras el respaldo institucional de Urtasun” a La Invisible, el alcalde malagueño, Francisco de la Torre, “reconsidere su amenaza de desalojo”.