València, 19 jun (EFE).- Una operación conjunta de la Agencia Tributaria y la Policía Nacional ha desmantelado en Valencia un grupo criminal con 25 personas, ya detenidas, dedicado al tráfico de cocaína que contaba con un laboratorio que podía elaborar hasta 30 kilos al día de esta droga con una prensa de 15 toneladas de peso.
Según informa la AEAT, en la operación ‘I.Amable/Sunka/Zafra’ se han practicado una decena de entradas y registros en ocho localidades de la provincia de Valencia que han dado lugar a la intervención de maquinaria, precursores y tanto pasta base -camuflada en pulpa de guayaba- como cocaína, así como dinero de curso legal y billetes falsificados, armamento y munición, cinco coches de alta gama, veintiocho móviles y diversa documentación.
Entre los detenidos hay doce personas de nacionalidad colombiana, nueve españoles, dos albaneses, un mexicano y un italiano, mientras que el juzgado de Ontinyent (Valencia) que dirige la investigación reclamó las órdenes internacionales de detención para el resto de miembros de la organización que, en el momento de la actuación, estaban fuera de España. Las investigaciones continúan y no se descartan nuevas detenciones.
La operación se inició en julio de 2024, con la detección de una empresa española a la que se consideraba sospechosa de introducir sustancias estupefacientes por el puerto de Valencia. Esta sociedad mantenía relaciones comerciales con una exportadora con una larga lista de antecedentes por tráfico de drogas.
La sociedad investigada realizó una primera importación de pulpa de fruta congelada en agosto de ese mismo año y, a partir de ese momento, los investigadores controlaron sus operaciones mientras ahondaban en el entramado económico de la entidad y en la propia actividad de su administradora, cuyos ingresos en apariencia se limitaban al cobro de una prestación por desempleo, pese a que sufragaba operaciones de importación internacional de contenedores.
La investigación policial logró detectar cómo parte de la pulpa de guayaba se llevó a un chalet en Oliva (Valencia), alejado de zonas habitadas. La mercancía fue descargada en su interior y dejada a la intemperie, ya sin interés por respetar la cadena de frío.
Tras localizar a varios sospechosos de la organización en diferentes puntos de la provincia, la actuación se precipitó al preverse que ya habían obtenido la sustancia estupefaciente, por lo que se solicitaron las entradas y registros pertinentes, en dos fases en ocho localidades de la provincia de Valencia.
Se detuvo a siete personas, seis sudamericanos y un español, que se encontraban trabajando en la localidad de Alberic en un sótano, en malas condiciones de habitabilidad y ventilación, donde estaban manipulando la pulpa de guayaba para separar de este producto la pasta base de cocaína.
En el resto de registros practicados se intervino dinero, pequeñas cantidades de droga y abundante material químico, además de pegatinas con el anagrama de una marca de coches, que iban a ser utilizados para marcar los paquetes del estupefaciente.
Una prensa de 15 toneladas
E Torrent se localizó un segundo laboratorio, donde la organización llevaba a cabo el proceso de clorhidratación de la pasta base de la cocaína y disponía de una prensa de quince toneladas.
Según las características y medios que presentaba el ‘macrolaboratorio’ dividido en dos ubicaciones, los investigadores estiman que, de tener un flujo continuo de trabajo, podría llegar a producir de 20 a 30 kilos de cocaína al día.
Se detuvo entonces a dieciocho personas y se intervinieron 32.735 euros, 38.850 euros falsos, 38,2 kilos de pasta base de cocaína, 7,4 kilos de cocaína, 87 gramos de hachís y 94 gramos de marihuana.
La organización contaba también con armas y munición: dos machetes, cuatro pistolas, un revólver, una pistola de caza, 30 cargadores de diferentes armas y calibres, entre 500 y 1.000 cartuchos de munición, un silenciador, una pistola eléctrica y tres defensas extensibles.
También se han intervenido cinco coches de alta gama, chalecos de policía, una baliza de seguimiento, 28 teléfonos móviles, varias tarjetas SIM, diversas anotaciones contables y otra documentación.
Posteriormente, se procedió a la detención, los días 21 y 22 de mayo, de otras siete personas.