Miami (EE.UU.), 29 jul (EFE).- La Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (VEPPEX) pidió este martes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que capture al mandatario Nicolás Maduro y a otros 400 funcionarios de Venezuela, después de que Washington declaró como terrorista al Cartel de los Soles, al que vincula con el chavismo.
La asociación, con sede en Florida, donde está la mayor diáspora venezolana en Estados Unidos, solicitó en una carta abierta a Trump que «el Departamento de Justicia vaya tras los más de 400 oficiales venezolanos metidos en el cartel, empezando por Maduro y Diosdado Cabello, con cargos por terrorismo y narcotráfico».
Urgió que se ofrezcan recompensas y se lancen operaciones de inteligencia para capturar a los cabecillas del cartel «como Maduro y Cabello (actual Ministro del Interior)», trabajando con agencias como la DEA y aliados internacionales, expuso la carta firmada por el presidente de VEPPEX, José Antonio Colina.
Los exiliados respaldaron el anuncio del Departamento de Estado de Estados Unidos, que el viernes señaló al Cartel de los Soles, un grupo que Washington asegura que está vinculado al Gobierno venezolano, como una organización terrorista.
La decisión de incluir al Cartel de los Soles en la lista de organizaciones terroristas permitirá que EE.UU. use «todos los recursos a su disposición para impedir que Maduro siga beneficiándose de la destrucción de vidas estadounidenses y desestabilizando el hemisferio», según el Departamento de Estado.
VEPPEX consideró que «este paso pega duro al narcoterrorismo del régimen de Nicolás Maduro», pero pidió más medidas, como «congelar todo su dinero» y que «EE.UU. presione a Europa y América Latina para que también declaren al cartel como terrorista y lo aíslen por completo».
Pese al respaldo a las medidas, la organización también pidió ampliar el Estatus de Protección Temporal (TPS), pues la Corte Suprema autorizó en mayo a la Administración de Trump revocar este programa que protege a más de 300.000 venezolanos en Estados Unidos, donde abogados están apelando.