Madrid, 22 may (EFE).- El cuádruple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen (Red Bull), vencedor el pasado domingo en Imola (Italia), intentará cuestionar de nuevo el dominio de los McLaren este fin de semana en Mónaco, sede del octavo Gran Premio del Mundial de Fórmula Uno y de la carrera más icónica del curso.
El australiano Oscar Piastri (McLaren), tercero en el Autódromo Enzo e Dino Ferrari después de haberse anotado cuatro de las primeras seis carreras del año, lidera el Mundial con 146 puntos, trece más que su compañero, el inglés Lando Norris -segundo el pasado domingo- y con 22 de ventaja respecto a ‘Mad Max’, que volverá a intentar incomodar a la escudería de Woking en las estrechas calles de Montecarlo, donde buscarán mejor fortuna los españoles Carlos Sainz (Williams) y Fernando Alonso (Aston Martin), y seguirá su proceso de re-adaptación a la categoría reina el argentino Franco Colapinto (Alpine).
Sainz, sin suerte y víctima de una mala decisión estratégica de su equipo -le pararon antes de tiempo-, fue octavo en Imola, donde el doble campeón mundial asturiano, muy desafortunado -perjudicado por el coche de seguridad virtual-, acabó undécimo, perdiendo otra clara ocasión de puntuar tras haber firmado el mejor sábado del año que lo había situado quinto en parrilla. Un puesto por delante de su compatriota.
Colapinto, de 21 años, que disputó las últimas nueve carreras de 2024 (con Williams), regresó a la categoría reina como sustituto del australiano Jack Doohan en Alpine, escudería y coche con los que seguirá familiarizándose en la mítica prueba de la Costa Azul tras haber finalizado decimosexto en Imola.
La novedad en Mónaco -una pista angosta de 3.337 metros y 19 curvas en la que es casi imposible adelantar-, donde la calificación prácticamente decide el resultado de la carrera, es que este año será obligatorio hacer al menos dos cambios de neumáticos (usando dos compuestos distintos en caso de que se corra en seco), con el fin de que las estrategias puedan animar el espectáculo, en una carrera que se resolvía a una sola parada.
A partir de este viernes, cuando arranquen los entrenamientos libres, se rodará con neumáticos de la gama de compuestos más blanda de todas, la misma que en Imola. Es decir: los C4 (duros, reconocibles por la raya blanca), C5 (medios, raya amarilla) y C6 (ultra blandos, roja).
Los ensayos se completarán el sábado, horas antes de la calificación que ordenará la formación de salida de la carrera del domingo, prevista a 78 vueltas para completar 260,2 kilómetros.
Mónaco integró el primer calendario de la F1, allá por 1950 -ganó el quíntuple campeón del mundo argentino Juan Manuel Fangio-, y, desde 1955, lo ha hecho de forma ininterrumpida, salvo en 2020, a causa de la pandemia del covid-19.
No son pocos los que creen que la esencia de la Fórmula Uno, creada hace 75 años y que acaba de anunciar entre sus innovaciones con miras a 2026 la presencia -en forma de ‘mascotas’- de personajes de una conocida empresa de animación, no se concibe sin la presencia de dos elementos básicos. Uno es la escudería Ferrari -que tras un sábado para el olvido ‘maquilló’ su actuación en Imola con el cuarto puesto del septuple campeón mundial inglés Lewis Hamilton y el sexto del monegasco Charles Leclerc-. El otro es el Gran Premio de Mónaco.
Leclerc hizo historia hace un año al convertirse en el primer monegasco en ganar en casa una carrera de F1 (Louis Chiron subió a lo alto del podio en 1931, exactamente 19 años antes de que se creara la categoría reina).
Alonso sumó dos de sus 32 victorias -en 2006, el año que revalidó título, y en 2007- y seis de sus 106 podios en Mónaco. El último de ellos hace dos años, cuando acabó segundo en su primera temporada con Aston Martin, que, a pesar de no puntuar en Imola, invita a sus responsables a esperar mejores resultados con los avances introducidos en el AMR25.
Sainz, cuatro veces victorioso en la división de honor, subió tres veces al podio en Montecarlo: fue segundo en 2021 y 2022; y tercero el año pasado.
Nadie iguala las seis victorias del mítico Ayrton Senna, triple vencedor del certamen para Brasil, en el Gran Premio más glamour y solera de todo el Mundial.
De entre los activos, Sir Lewis es el más victorioso, con tres éxitos en las estrechas calles del Principado de la Costa Azul. Y los dos triunfos de Alonso sólo los empata Verstappen, que intentará cuestionar de nuevo -en Imola lo hizo de forma magistral- el dominio de McLaren. Líder destacada del Mundial de constructores, con 279 puntos -132 más que Mercedes y con 148 sobre Red Bull-, y la que más triunfos ha festejado en Mónaco. Quince, en total.
Adrian R. Huber