Vingegaard cae en la trampa de la rotonda pero acaba de rojo

El ciclista danés Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike) celebra su victoria en la segunda etapa de la Vuelta a España que ha discurrido este domingo por carreteras italianas con un trazado de 157 kilómetros entre Alba y Limone Piemonte, y donde se ha producido el primer final en alto de la carrera. EFE/ Javier Lizón

Limone Piemonte (Italia), 24 ago (EFE).- La trampa de la segunda etapa de la 80ª Vuelta a España no estaba en el exigente final de Limone Piemonte, sino a 26,3 kilómetros de la meta en una rotonda que, combinada con la lluvia, mandó a más de una veintena de ciclistas al suelo.

Entre los afectados se encontraba el gran favorito a la victoria final en la Vuelta, el danés Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike), aunque terminó anotándose el triunfo parcial y vistiéndose por primera vez de rojo.

La diferencia para unos y otros en la maldita rotonda estuvo en el lado por el que cada uno la afrontó. Los UAE Emirates lo hicieron por el izquierdo y salieron indemnes del envite. Los que lo que lo hicieron por el derecho se vieron, en mayor o menor medida, afectados. Aunque muchos no se fueron al suelo, la gran mayoría tuvo que poner pie a tierra.

Hasta una veintena de afectados

El ciclista danés Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike) vista su maillot rojo de líder tras su victoria en la segunda etapa de la Vuelta a España que ha discurrido este domingo por carreteras italianas con un trazado de 157 kilómetros entre Alba y Limone Piemonte, y donde se ha producido el primer final en alto de la carrera. EFE/ Javier Lizón

Los que no estuvieron involucrados se situaron al frente del pelotón y decidieron que había que esperar a que los principales afectados se reintegrasen al grupo para seguir en los kilómetros siguientes la lucha por la segunda victoria en la carrera española.

Entre las localidades de Corio y Benne de Corio estaba ubicada la ratonera en la que se vio encerrada una buena parte del pelotón. El primero en irse al suelo fue un componente del Q36.5 y a partir de ahí el efecto dominó fue inevitable. Habrá que esperar a que los ciclistas evalúen los daños cuando lleguen al hotel para saber hasta qué punto puede condicionar la carrera esta caída.

El equipo de Tom Pidcock estuvo trabajando al frente del grupo toda la jornada pensando en él y para evitar que la escapada pudiese prosperar. Junto a él se cayó prácticamente todo el equipo Visma-Lease a Bike, con el danés arrastrando por el suelo sin que aparentemente los daños fuesen a más.

Entre ellos también estuvieron involucrados unos cuantos Movistar, con Carlos Canal y Jorge Arcas entre los implicados.

Uno de los que peor lo pasó tras la caída fue uno de los compañeros de Vingegaard, el francés Axel Zingle, al que se le salió un hombro y tras unos minutos de incertidumbre volvió a subirse en su máquina y acabó la jornada el último, a 24:05, con el danés ya vestido de rojo como líder de la carrera.

La evaluación de los daños, en los próximos días

El análisis de la situación de cada uno de los afectados, como el caso de Zingle o el propio Vingegaard, deberá esperar unas horas y en las próximas etapas podrán analizarse con mayor precisión los daños acontecidos en este inesperado incidente de carrera.

Pogacar también se cayó en el Tour

Como el esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates), que se cayó en el pasado Tour en el que terminó anotándose su cuarto triunfo en la general luciendo un manguito para proteger las heridas en su brazo izquierdo, el danés también se ha visto afectado en ese lado del cuerpo, aunque cuando le enfocaron las cámaras encima de la bicicleta levantó un dedo en señal de que todo estaba correcto.

Quedan diecinueve etapas por disputar y demasiados escenarios por los que el pelotón deberá circular para decidir el sucesor del esloveno Primoz Roglic (Red Bull-Bora), ausente en la Vuelta tras su participación este 2025 en Giro y Tour, y junto al español Roberto Heras el ciclista que más veces ha ganado la Vuelta, con cuatro victorias en la general para cada uno.

La carrera no acabará hasta el próximo domingo 14 de septiembre en Madrid y las vicisitudes por las que deberán pasar los participantes serán numerosas y deberán superar, como ha sucedido camino de Limone Piemonte, más de una situación comprometida.

José Luis Sorolla