Vogue nombra a Chloe Malle como su nueva editora de la edición estadounidense

Fotografía de archivo de un grupo de modelos al posar para un evento de la revista Vogue, en Aventura (Florida, EE.UU.) EFE/Cristóbal Herrera

Nueva York, 2 sep (EFE).- La revista Vogue, referencia por antonomasia de la moda y el glamour, anunció este martes el nombramiento de Chloe Malle como jefa editorial de la edición estadounidense en sustitución de Anna Wintour, que el pasado junio anunció su retirada tras casi cuatro décadas al frente de la publicación.

Malle, de 39 años, era hasta ahora editora de la edición digital (Vogue.com) y codirigía el podcast de moda The Run-Through, y de inmediato quiso dar una señal de continuidad con el legado de Wintour: «Me siento increíblemente afortunada de tener a Anna justo al final del pasillo como mi mentora», dijo la nueva editora en sus primeras declaraciones que recoge la revista.

La misma Wintour se encargó de dejar claro que Malle había sido una elección suya: «Cuando se trata de elegir a alguien como editora del Vogue estadounidense, supe que tenía la oportunidad de hacer lo correcto (…) Chloe ha demostrado que podrá encontrar el equilibrio entre la larga y singular historia de Vogue EEUU y su futuro en la línea presente de la nueva», dijo.

Wintour recordó que Vogue es actualmente mucho más que una revista, por su carácter multifacético como organizadora de eventos como la Met Gala o el Vogue World, que llega a audiencias globales.

Chloe Malle es un ‘producto de la casa’, ya que comenzó a trabajar en la revista en 2011, cuando fue nombrada ‘editora social’ y se encargaba de la cobertura de bodas y otros eventos.

Además, de 2016 a 2023 fue editora colaboradora de Vogue, escribiendo artículos y supervisando «proyectos especiales», entre otras tareas, según detalla el artículo.

Más allá de Vogue, Malle también ha escrito para otros medios como The New York Times, Architectural Digest o The Wall Street Journal.

Malle reemplazará a Anna Wintour, una de las figuras más influyentes del mundo de la moda, que deja su puesto tras casi cuatro décadas en él.

Wintour, de 75 años, reveló en junio a sus empleados en una reunión que buscaba un sustituto o sustituta de su cargo, pero indicó que continuaría trabajando como editora global de Vogue y también como jefa de contenidos del grupo editorial, Condé Nast.

La ejecutiva se convirtió en editora de Vogue en EE.UU. en 1988 y hoy es considerada una gurú del sector, visible en la primera fila de los desfiles más importantes, dirigiendo el instituto de moda del Museo Metropolitano de Nueva York y también su Met Gala.

En los años previos a dirigir la edición estadounidense de Vogue, Wintour fue directora creativa de la revista y pasó varios años al frente de su edición británica.

La primera portada de su reinado, en noviembre de 1988, tuvo un gran impacto, puesto que eligió para vestir a la modelo Michaela Bercu un suéter de la firma de alta costura, Christian Lacroix, y unos tejanos de Guess de unos 50 dólares. Este impacto replanteó cuestiones de estilo.

Los años siguientes fue artífice de numerosas portadas protagonizadas por las celebridades del momento, y el contenido de la revista pasó de ser de puramente moda a abordar asuntos de actualidad y de la cultura pop.

Su fama se disparó después de que la retrataran tácitamente en la película ‘El diablo viste de Prada’ (2009), una adaptación de la novela homónima, donde la actriz, Meryl Streep, interpretaba a la implacable jefa de una revista de moda, llamada Miranda Priestley.

Wintour, bajo sus actuales responsabilidades en Condé Nast, supervisa los contenidos de prácticamente todas las revistas del grupo, incluida la revista Vogue, tarea en la que ahora podrá centrarse por completo tras ceder el trabajo más codiciado del mundo de la moda a un sucesor o a una sucesora.