Volcán de Kamchatka, despierto tras 600 años de inactivo, escupe cenizas a 6 km de altura

Fotografía facilitada por el Instituto de Vulcanología y Sismología FEB RAS muestra el volcán Krasheninnikov expulsando humo y ceniza durante una erupción en el territorio de Kamchatka, Rusia, este domingo. Científicos han registrado por primera vez la erupción del volcán Krasheninnikov en Kamchatka, según informa el Equipo de Respuesta a Erupciones Volcánicas de Kamchatka (KVERT) del Instituto de Vulcanología y Sismología (IVS) de la Rama del Lejano Oriente de la Academia Rusa de Ciencias. Según el personal de la Reserva Natural Kronotsky, las emisiones de ceniza alcanzan actualmente una altura de 5 a 6 km sobre el nivel del mar, y parte del territorio de la reserva está cubierto de depósitos de ceniza. EFE/ Nstitute Of Volcanology And Seismology Feb Ras Handout ***SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)***

Moscú, 4 ago (EFE).- El volcán Krashenínnikov de la península rusa de Kamchatka, que entró en erupción tras 600 años de inactividad, expulsó una columna de cenizas de unos 6 kilómetros de altura, informaron hoy las autoridades rusas.

«La columna de cenizas tras la erupción del volcán Krashenínnikov se extiende hacia el sureste a una altitud de hasta 6 km sobre el nivel del mar», según un comunicado del Servicio Geofísico de la Academia de las Ciencias de Rusia.

Mientras, de acuerdo con el Instituto de Vulcanología y Sismología, la erupción de Krashenínnikov puede representar un peligro para los turistas en el Valle de los Géiseres, uno de los campos de géiseres más grandes del mundo, ubicado en Kamchatka.

«En teoría, la erupción podría representar un peligro si el viento se dirige en esa dirección», advirtieron los científicos.

La semana pasada en Kamchatka, que acoge casi 130 volcanes -una treintena activos-, también entró en erupción el Kliuchevskói, el volcán activo más alto de Eurasia.

La elevada actividad volcánica en la península rusa del lejano oriente sigue a unos potentes terremotos que sacudieron recientemente Kamchatka, uno de ellos de magnitud 8,8, el mayor desde 1952.

Después de los sismos, las autoridades locales declararon la alerta de tsunami en varias regiones costeras rusas.