Redacción Medioambiente, 25 jun (EFE).- Nueve de cada diez animales silvestres capturados para el tráfico ilegal mueren durante el traslado a sus destinos: con este dato la Asociación Latinoamericana de Parques Zoológicos y Acuarios (ALPZA) intenta concienciar sobre las consecuencias nocivas de esta práctica, coincidiendo con el Día Internacional contra el Tráfico Ilegal de Fauna Silvestre.
«Los animales silvestres no son mascotas», advierten los parques, que reclaman «acciones concretas para combatir una de las amenazas más urgentes para la biodiversidad».
ALPZA ha publicado este miércoles, como lanzamiento de la campaña, la imagen de un ave atada con una cuerda, de la que cuelga una etiqueta con su precio. «Ser tu mascota es su peor condena», advierte a posibles compradores. «El mascotismo de fauna silvestre promueve el tráfico ilegal de especies. No compres, infórmate y protege», añade.
La asociación estima que este delito «mueve miles de millones de dólares anualmente, compitiendo con el tráfico de drogas, armas y personas».
América Latina, la región con mayor biodiversidad del mundo, «se ve particularmente afectada, lo que subraya la urgencia de visibilizar esta problemática».
Según datos ofrecidos en un comunicado, el tráfico ilegal de fauna ha causado una disminución de hasta el 71 % en algunas poblaciones.
«A esta alarmante cifra se suma una realidad devastadora: 9 de cada 10 animales capturados por el comercio ilegal mueren durante el traslado. Estas estadísticas reflejan la necesidad apremiante de actuar para frenar esta amenaza global contra la biodiversidad», subrayan.
Los parques zoológicos de Latinoamérica destacan que las especies capturadas sufren condiciones extremas, tienen altos índices de mortalidad y son apartadas de sus ecosistemas, con el consiguiente desequilibrio ecológico.
Pero, además, el tráfico ilegal «representa riesgos sanitarios significativos para las personas», indican.
ALPZA reivindica el papel «crucial» de sus parques «en la rehabilitación de fauna víctima del tráfico ilegal y en el liderazgo de programas de conservación tanto ex situ como in situ», así como en las investigaciones científicas para la supervivencia de las especies y en la sensibilización de sus millones de visitantes.
La campaña, a la que se han sumado zoológicos y acuarios de otros continentes, se activa en este Día Internacional pero se prolongará durante un mes con distintas acciones en las instituciones participantes.