Murcia, 31 mar (EFE).- La Junta de Gobierno del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura celebra este lunes los 46 años de la construcción del trasvase con “zozobra”, en palabras de su presidente, Lucas Jiménez, ante lo que se avecina con la modificación de las reglas de explotación de esta infraestructura anunciadas por la ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen.
Jiménez ha dicho a los periodistas, tras ser recibido en el Palacio de San Esteban de Murcia por el presidente autonómico Fernando López Miras, que la cuenca del Segura es “inestable” y necesitará del auxilio del Estado una vez se modifiquen las citadas reglas que supondrán un recorte a los envíos de agua.
Por su parte, López Miras ha manifestado que “España no puede permitirse que se sigan cuestionando infraestructuras esenciales para la vida de millones de personas”.
Incidió además en que “hay agua suficiente para todos, y hoy se demuestra viendo las reservas de las cuencas hidrográficas cómo en España hay agua pero está mal repartida” porque en la mayoría del país están rozando el 80 por ciento de la capacidad de sus embales y en el Segura no llegan al 25 por ciento.
“Es una barbaridad, por no decir una vergüenza, que se siga cuestionando que en España no hay agua suficiente para todos cuando sí la hay y sólo se deben construir las infraestructuras necesarias para maximizar su aprovechamiento”, agregó López Miras.
“Por eso vamos a defender siempre el acueducto Tajo-Segura, porque nos asiste la razón y por eso nadie va a conseguir doblegarnos, sea quien sea y esté donde esté, ya sea en La Moncloa o al frente de un ministerio, ante decisiones unilaterales como la del recorte del trasvase”, concluyó.